“To live a creative life, we must lose our fear of being wrong”.

Hoy tengo una declaración importante que hacer, y me he tomado el espacio de nuestro querido Blog PPC para hacerla.

No temamos a la falta de inspiración, como dice la frase que titula esta entrada: para vivir una vida creativa debemos perder el miedo a estar equivocados.

Un nuevo período del año se acerca, con estrés emocional, con subidas y bajadas, con amores, esperanzas y desilusiones. Octubre es el inicio del fin. La despedida de un año tan horripilante (desde mi perspectiva) como el 2008. Y no hay nada que me alegre más que saber que un nuevo ciclo llega… porque son las energías renovadas las que nos dan fuerza para seguir.

Astrológicamente ahora entramos a este torbellino de energías positivas. Teniendo fe y buenos deseos el cosmo se asegurará de mantenernos en pie. Y no se preocupen, que me aseguraré que todos tengamos nuestros pies bien puestos en la tierra, mientras nuestras almas se aferran al mundo de los sueños.

Aún no hay nada claro, así que no haré un balance acerca de este año. Pero de seguro algunas cosas positivas de las vivencias de un 2008 ocupado ya se han hecho notar, y no me refiero sólo a la creación de este espacio abierto para la expresión.

Hay muchas veces que el temor se adueña de nuestros sentidos. Que el miedo al fracaso nos lleva a dar media vuelta frente a las puertas y ventanas que el destino serpenteante nos abre. Sin embargo, no es a las caídas a lo que debemos temer, sino a la inamovilidad, a la falta de constancia y la resignación de quedarnos ahí, varados en medio de la nada.

Porque el que nada hace, nada teme. Pero en temer, en arriesgarnos, en sentir en nuestra lengua el dulce sabor de lo logrado… es donde se esconden los más grandes tesoros del vivir.

Un llamado a las últimas fuerzas.

De esperanza y fe ciega en el mañana.

Un grito desesperado por llegar tan alto como nuestros sueños sean…

Un beso desde un positivo Nunca Jamás.
Ember.